Los alimentos veganos procesados han evolucionado para ofrecer nutrición completa, gracias a la fortificación con vitaminas y minerales clave. Aquí exploramos productos innovadores que incorporan estos ingredientes funcionales.
Ingredientes destacados:
Vitamina B12 (Cianocobalamina) + Vitamina D2: En leches de almendra y soja.
Carbonato de Calcio: Para equivalencia nutricional con la leche de vaca.
Riboflavina (B2): Añadida en bebidas de avena.
Ejemplo: Leche de soja fortificada con Vitamina D2 y B12 (ideal para huesos y sistema nervioso).
Ingredientes clave:
Hierro (Bisglicinato) + Zinc: En hamburguesas de guisante.
Vitamina B1 (Tiamina Mononitrato): En chorizos veganos a base de soja.
Fosfato de Calcio: Para mejorar textura y aportar calcio.
Dato: Beyond Meat usa citrato de sodio como regulador de acidez.
Fortificación típica:
Vitamina A Palmitato: En hojuelas de maíz veganas.
Niacinamida (B3) + Vitamina E: Antioxidantes en cereales integrales.
Fosfato de Magnesio: Para función muscular.
Producto estrella: Cereales enriquecidos con B1, B2 y hierro.
Innovaciones:
Gomitas con Vitamina C (Ácido Ascórbico) y K2: Para defensas y huesos.
Barritas con Citrato de Calcio + Vitamina D3: Alternativa a lácteos.
Mix de frutos secos con Óxido de Magnesio: Antiestrés natural.
Biodisponibilidad: El citrato de magnesio se absorbe mejor que el óxido.
Estabilidad: La vitamina E evita la oxidación de grasas en productos horneados.
Regulación: El lactato de sodio alarga vida útil en fiambres veganos.
Algunos críticos señalan:
Exceso de fosfatos en análogos de queso vegano.
Vitaminas sintéticas vs. naturales (aunque son químicamente idénticas).
¿Sabías que…? La vitamina D3 vegana (de líquenes) ya existe y se usa en leches vegetales premium.